martes, 5 de mayo de 2009

UNDERWORLD Rise of the Lycans. Decente "cierre" para una historia desaprovechada.


Underworld Rise of the Lycans, es la tercera película que se hace sobre la saga "Underworld" aunque los eventos relatados son en realidad una precuela para sus dos predecesoras (Underworld y Underworld Evolution). Me alegra decir que de cierto modo, Rise of the Lycans es mejor que la segunda película Underworld Evolution, porque el relato esta mejor realizado que las carnicerías y lucimientos de la segunda película, pero si no eres fan de la saga y tampoco del género, entonces mejor no la veas. En general, me parece que aunque éste tercer filme es un decente "cierre" (en realidad es un precuela), la historia pasada por las tres películas esta bastante desaprovechada, quizás por la poca ambición de los realizadores o la pobreza artística de los mismos.


En esta ocasión, somos testigos de la historia de Lucian, el gran líder de los Lycans y la vampira Sonja, la hija del anciano Víctor. Entre ellos ocurre un romance prohibido que terminará por darle al ya iniciado conflicto de las dos especies el carácter "formal" de guerra. Los que hayan visto la primera Underworld sabemos que Lucian es el auténtico líder de los hombres lobo, el más feroz y el menos bestia (en contraste con William, que aunque es el primer Lycan y el más poderoso, es más bestia que humano) y aquí presenciamos todo su ascenso, desde su nacimiento hasta su consagración como el archienemigo de los vampiros. El personaje de Selene (Kate Beckinsale), protagonista de las dos anteriores aún no existía en la línea argumental del filme y solo la veremos al final como un enganche cronológico de la trilogía.

Nos situamos en el tiempo en el que William ya fue atrapado, donde los poderosos vampiros ancianos Marcus y Amelia estan durmiendo y solo el tercero de ellos, Víctor, esta despierto rigiendo a los chupadores de sangre, siendo los Lycans sus esclavos. Lucian nace de Lycans pero es el primero de su especie que puede regresar a su forma humana, y por razones del destino Víctor en lugar de matarlo, lo adopta como su Lycan preferido. Siendo aún muy joven, Lucian conoce a Sonja, la hija de su amo, por quien desarrolla un afecto especial que se transformará en amor. Sonja forma parte del grupo de vampiros conocido como los "Death Dealers" o traficantes de la muerte (mismo grupo al que pertenece después Selene) y Lucian trabaja como herrero con ciertos "beneficios" que no gozan el resto de lycans. Sin embargo, el romance entre Lucian y Sonja es descubierto por Tanis (Steve Mackintosh), el secretario de Víctor y desde allí empezará una serie de eventos sangrientos y desafortunados.


Toda la historia transcurre en una época antigua, con espadas, castillos, armaduras y ballestas. Los chupadores de sangre estan regidos por Víctor y un consejo de vampiros, los lycans que pueden tomar forma humana trabajan como esclavos para ellos y los lycans hijos directos de William, los que solo son bestias, estan en los bosques y las montañas asechando siempre a humanos y vampiros por igual. Así que los vampiros estan en constante lucha con las bestias, Sonja es rebelde y suele ser muy temeraria a la hora de salir a combatir mientras que Lucian la protege desde la muralla. La trama principal se construye a partir de dos conflictos que terminan por encontrarse, el primero es que los vampiros empiezan a tener problemas para contener a los lycans de William, pues han crecido en número y atacan cada vez más a los humanos que les pagan tributo en tesoros y recursos, y por si eso fuera poco, su hija Sonja se ausenta del consejo y de las deliberaciones, teniendo Víctor que recibir la presión del resto de consejo, quienes le piden que usen a sus lycans esclavos para ayudarles en la defensa, dándole más privilegios a dichos lycans. El segundo conflicto es el deseo que nace en Lucian por liberar a sus hermanos lycans de la esclavitud y de los tratos crueles que reciben de los vampiros y escapar al mismo tiempo del castillo junto con su amada Sonja.

Si esta trilogía tiene un aspecto positivo y fuerte, es la continuidad de los actores que han representado a sus personajes principales. Bill Nighy es siempre Víctor, el líder de los vampiros, en un papel que le viene como anillo al dedo, el rostro de Nighy como el anciano vampiro es el más escalofriante de toda la saga, pero no solo es su rostro, el británico actor representa su papel con una gran convicción, totalmente enchufado, sus gestos y sus arrebatos de ira son perfectos, ni siquiera se le puede tachar de sobreactuación, pues después de todo es un vampiro, sin duda el mejor de toda la película. Luego tenemos a Lucian, interpretado al igual que en la primera película por el galés Michael Sheen, quizás es el segundo más destacado, Sheen es un actor bastante bueno y que a pesar de tener casi siempre papeles secundarios, los interpreta con gran solvencia (aún no he visto Frost/Nixon, donde sí es protagonista). Muchas de las emociones de Lucian son transmitidas por su penetrante mirada y su voz de líder. También podemos ver a Raze, el enorme lycan moreno que vimos en la primera parte, igualmente interpretado por Kevin Grevioux (imponente en tamaño y en su peculiar voz) presenciamos cómo éste enorme humano y luego Lycan hace su amistad con Lucian para convertirse en su mano derecha. Sonja es interpretada por Rhona Mitra, su actuación me pareció correcta, quizás la más fria de los personajes en cuanto histrionismo, pero cumple al mismo tiempo con la misión de tener un parecido físico con el personaje de Selene, algo que era esencial para la historia, pues es ésta la razón por la cual Víctor convierte después a Selene en vampiro y la adopta como su hija (porque le recordaba a su hija Sonja).

Los ambientes son todos oscuros, con un tono de azul (el mismo tono que esta presente en toda la trilogía) incluso en las escenas de día, la cinematografía es buena y muy apropiada para el género, aunque sin nada demasiado sorprendente. Tambien los efectos especiales, más notables en los lycans, parecen haber mejorado respecto al primer filme. Los animatronics de los lycans tambien se ven mejor detallados. Las armaduras de los vampiros son igualmente bien hechas y apropiadas para dichos seres. Lo único que no me gustó fueron algunas de las peleas, en especial la que llevan a cabo Lucian y Sonja contra el resto de vampiros, han usado la ahora de moda cámara movediza y no logramos apreciar casi ninguno de los movimientos, sigo pensando que este "efecto" solo me ha parecido bien utilizado en Batman Begins y en la saga de Bourne. Afortunadamente la pelea final de Víctor con Lucian mejora en éste aspecto.


El director Patrick Tatopoulos estuvo involucrado en las anteriores entregas, por lo tanto supo lo que debía hacer, consiguiendo una mejor narración que su predecesora pero tampoco brillando demasiado en éste aspecto (porque ya sabemos en qué terminará y porque una vez más no aprovechan la historia para darnos algo mejor). Eso sí, sus actores protagonistas han hecho un rescatable trabajo que al final hacen un filme entretenido. Con ésta se cierra una trilogía que ha sido relativamente exitosa para lo poco a lo que aspiraba en un inicio, sin embargo debo mencionar que una historia de guerra entre vampiros y hombres lobo daba para mucho más de lo que se ha hecho, en mi opinión. Por ejemplo, no se trabajó mucho los detalles de cómo se transmitia el gen vampírico, algo que sí esta bien explicado en otras representaciones (Drácula y las crónicas vampíricas de Anne Rice). También parece curioso que en ésta última película, Lucian mataba a otros vampiros con un simples cortes en el cuello o en la nuca, si se supone que son inmortales y únicamente la decapitación o la incineración los mataría. El desaprovechamiento y destrucción de personajes importantes que habrían podido dotar a las peliculas de eventos o giros de historia mucho más interesantes, AVISO SOPILER en la primera película son destruídos Víctor, Lucian y Amelia; en la segunda película William, Marcus y Alexander Curvinus ¿no se podía hacer algo muchísimo más interesante con ellos? FIN SPOILER, también achacho que Michael Corvin no evolucionó como personaje en la segunda parte. Sus aciertos, como ya dije, han sido conservar a los mismos actores quienes interpretan a los mismos personajes en la trilogía, y encajar bien los argumentos (por ejemplo, en ésta tercera se justifica muy bien el deseo de Lucian en crear a un híbrido de vampiro y lycan).

Underworld parece haber llegado a su final, una aceptable trilogía para un argumento original (es decir que no esta basada ni en cómics ni en libros) aunque todavía quedan dos posibles capítulos que no se han realizado, uno de ellos es mostrar los eventos de la creación de Selene como vampira y el otro es ver qué fue del futuro de Selene con Michael. Si no pueden conseguir un buen guión y a los respectivos actores para una cuarta, mejor que se queden con éste decente cierre.

3 comentarios:

ATLAS dijo...

Yo tengo que verlas todas... aunque por algo ha sido... ¿qué tal si vemos primero ésta y luego las siguientes? creo que será un gran acierto (todo lo contrario a ver episodios 1,2 y 3 de Star Wars antes de las clásicas 4,5 y 6) jajajaja

Cadejo Negro dijo...

No lo había pensado así, pero SÍ... sería un gran acierto ver ésta película antes que las otras dos. Porque de esa forma el relato se vería cronológicamente coherente.

Cadejo Negro dijo...

Si, justo así como lo dices (yo tampoco he visto Hannibal Rising, pero por lo que se lee en internet, la película parece irrelevante). Pero volviendo a Underworld, la trilogía es bastante pasable, pero sí puede llegar a sentirse bastante entretenida.