miércoles, 18 de febrero de 2009

CORALINE, un tipo de cine que se niega a desaparecer



Coraline es una película de animación "stop motion", es decir que todo lo que vemos (casi todo) son objetos reales que han sido filmados cuadro por cuadro para crear la magia de movimiento. Su director Henry Selick, un reconocido experto en esa técnica de animación, ya se había "inmortalizado" cuando dirigió en 1993 "The Nightmare Before Christmas" (El Extraño Mundo de Jack, como se le conoció en Latinoamérica) donde le dio vida a una fantástica historia de Tim Burton. Coraline probablemente no llegue a convertirse en un título tan memorable como la del esqueleto Jack, sin embargo es una prueba auténtica y actual de un cine de cuentos al estilo clásico, no solo por la técnica de animación sino por su realización y argumento, de los que ya no se ven con frecuencia en el cine animado.

La película trata de Coraline, una niña de 11 años que recién se ha mudado con su familia a una grande y vieja casa llamada "El Palacio Rosado", donde alquilan solo una parte de ella. Los padres de Coraline estan tan ocupados con sus quehaceres que apenas prestan antención a su hija, provocando que Coraline se vaya a visitar al resto de inquilinos de la gran casa y a recorrer los rededores para pasar el tiempo. En una de sus exploraciones de la casa, Coraline encuentra durante una pequeña puerta sellada, sin embargo, cuando "accidentalmente" la abre de noche... se encuentra que al otro lado de la puerta se encuentra una realidad paralela a la suya, la misma casa, los mismos vecinos, su misma familia, solo que con dos grandes diferencias. La primera es que sus padres son fabulosos, divertidos y le prestan toda la atención que ella quiere, pero la segunda es que todos los que habitan ese lugar tienen botones en lugar de ojos. A pesar de todo lo bueno que encuentra, la presencia escondida de una bruja le pedirá un precio muy alto a Coraline, a cambio de permanecer en ese mundo aparentemente maravilloso.


El viaje de Coraline es el de una niña curiosa, dandole buen ritmo al filme, pues al principio queremos, al igual que ella, regresar a ese fantástico mundo lleno de colorido y donde todos los otros personajes paralelos son mucho más encantadores, resultando muy interesante ver cómo ella los va conociendo primero en el mundo real para luego verlos cambiados en el "otro mundo". Por ejemplo, el "Gran Bobinsky", vecino ruso con destrezas de gimnasta, le cuenta sobre su circo de ratones pero no la deja entrar en ningún momento a verlo, por otro lado, las señoras vecinas Forcible y Spink le cuentan sobre sus glorias pasadas, cuando eran unas maravillosas acróbatas, pero ahora no son más que dos ancianas despistadas en un lúgubre sótano, y por si eso fuera poco, todos le dicen Caroline en lugar de su verdadero nombre. Ahora bien, cuando entra al otro mundo, a parte de tener unos fantásticos padres, puede ver un gran espectáculo en el circo de ratones del Otro Gran Bobinsky y puede ver un show de acrobacia de las señoras Forcible y Spink (donde ya no son ancianas, sino dos jóvenes mujeres).

Pero todo es parte de la trampa de la bruja, y el espectador tendrá claras pistas, un poco menos obvias que los ojos de botón, por ejemplo.... en ese mundo siempre parece estar de noche, todos los vecinos le llaman correctamente por su nombre "Coraline" y al parecer, el gato negro que se encontró en el mundo real no parece tener ninguna diferencia (es el único que no tiene ojos de botón).


La historia esta basada en el libro del mismo nombre, del autor Neil Gaiman y recuerda mucho a los cuentos clásicos como los de los Hermanos Grimm, la película intenta ser una adaptación muy fiel del libro y traslada ese espíritu de cuentos para niños. Sin embargo, tiene un tratamiento bastante oscuro, no tanto por ausencia de luz (todo lo contrario) sino que hasta cierto punto por el toque tenebroso de la misma. Varios personajes tienen un aspecto tétrico pero al mismo tiempo simpático (como el Gran Bobinsky o las vecinas del sótano) . Es probable que algunos niños y niñas se espanten un poco con ciertas secuencias (que son visualmente impresionantes), pero la presencia de sus padres en el cine lo arreglará todo, sin duda alguna.


La película posee una alta calidad visual, considerando que los personajes y los entornos no son construidos por computadora, sino que son reales. El movimiento de los personajes es increíblemente natural y demuestra que éste director ha llegado muy lejos en cuanto a su técnica de animación. Buena película, recomendable para todos aquellos que gusten de los cuentos clásicos y admiradores de esta aparentemente inmortal forma de animación.


2 comentarios:

Priscila A. dijo...

la pelicula esta muy buena.

es divertida y te va atrapando de a poco.!!!!!!!!!!!!!!1

Anónimo dijo...

Buena película super historia